Con la cercanía del otoño nos tenemos que preparar para hacer frente a una probable y rápida propagación de la nueva gripe A como ya hemos podido observar que ha sucedido durante en el invierno del hemisferio sur donde el virus H1N1 ha desplazado a la gripe común.
Evitar el contagio va a ser tarea difícil y de la que deben preocuparse especialmente aquellas personas que se encuentren dentro de los grupos de mayor riesgo, ya establecido como los niños menores de 5 años, las embarazadas, los adultos con patalogías crónicas (enfermedades respiratorias, inmunodepresión…) y los mayores de 60 años (se infectan menos pero tienen mayor riesgo de que surjan complicaciones). Este grupo es considerado por las autoridades sanitarias como prioritario para administrales la vacuna contra la gripe A que será gratuita y disponible en España a partir de noviembre.
Aquellos que se encuentren fuera de este grupo de alto riesgo deberían preparse para sufrirla con el menor impacto posible, para ello es conveniente mantenerse en un buen estado de salud, como ya sabemos hacer con deporte, comidas sanas, y huir del estrés, del tabaco y del alcohol, etc….
Es necesario evitar el contagio, que no sólo se produce por el aire, lo más frecuente es que sea de forma indirecta cuando nos tocamos los ojos, nariz o boca depúes de haber tocado microgotas que contiene el virus y que se encontraban en otras superficies. Así la principal medida de prevención es lavarse las manos con agua y jabón de forma frecuente, al igual que prevenir frecuentar los lugares multitudinarios y el contacto con enfermos.
Una vez enfermos nuestra misión será prevenir ser los causantes de la propagación por el daño que se puede causar a las personas que nos rodean, será fundamental poder identificar las diferencias entre los síntomas de la gripe estacionaria y la gripe A.
Nuestra obligación será quedarnos 7 días en casa, en una habitación separada y cerrada, no ir a trabajar, a clase, ni recibir visitas, y el cuidador deberá usar mascarilla quirúrgica y extremar las medidas higiénicas. Habrá que beber mucho líquido y hacer reposo, sólo tomar antivirales en caso de que el médico lo proponga y no administrarse aspirina (puede causar una enfermedad rara y grave llamada síndrome de Reye). Recordad que sobrevivir a la gripe A nos inmunizará ante esta enfermedad en el futuro.
Tambien las empresas tienen un papel importante ante esta situación, son tareas propias el evitar la propagación entre sus empleados y el minimizar el impacto económico que puede provocar esta pandemia por fallos en las cadenas de suministro proveedor-cliente y por los costes asociados a las bajas de los empleados por enfermedad o por la necesidad de atender a sus familiares, para este fin el Ministerio de Sanidad y Política Social ha elaborado una Guía para la elaboración del plan de actuación de las empresas frente a emergencias: Pandemia de gripe.
Como vemos todos tenemos responsabilidad, tener una actitud proactiva será beneficiosa para todos y puede servir de experiencia ante situaciones futuras que podrían venir con mayor gravedad.